5 consejos para empezar
1 – Decide bien qué especie de hormiga quieres tener antes de lanzarte a comprar un hormiguero.
No todas las hormigas tienen las mismas necesidades ni requieren los mismos cuidados. Algunas necesitan hormigueros con humedad alta y otras en cambio pueden morir si tienen demasiada humedad en el interior del hormiguero. Unas comen semillas y otras comen insectos.
Lógicamente todos estos aspectos influyen mucho a la hora de elegir hormiguero. Por tanto, antes de comprar un hormiguero artificial debes saber qué especie quieres meter en él.
Para saber más sobre las diferentes especies, recomendamos visitar nuestro apartado de
, donde podrás encontrar las necesidades de humedad y requerimientos de alimentación de cada una, así como algunos consejos para su cuidado. También puedes pedirnos asesoramiento sin compromiso mediante nuestro sistema de chat que incorpora la página.
2 – Elige bien dónde vas a poner el hormiguero.
Las hormigas requieren estar en un lugar en el que no tengan muchas vibraciones ni les dé el sol directamente para evitar estresarlas o que se chamusquen. Por tanto, no es buena idea poner el hormiguero artificial al lado de una ventana ni en algún mueble en el que constantemente se estén poniendo cosas encima.
Eso sí, las hormigas están para poder observarlas y disfrutarlas, así que ponlas en algún lugar accesible pero que cumplan con las mínimas condiciones descritas anteriormente.
3 – Sobre la alimentación: podrás mantener tu colonia sin comprar alimento específico (bueno, para las Messor sí tendrías que comprar algún preparado de semillas).
Hay infinidad de alimentos que les puedes dar a tus hormigas de los que tienes habitualmente en casa, tales como agua con azúcar, agua con miel, paté, trocitos de jamón york bajo en sal, trocitos de pollo, fruta…Solo tienes que tener en cuenta que si les das trozos muy grandes que puedan meter en el hormiguero es posible que se pudran y que aparezcan hongos. Por tanto, asegúrate de ponerles trozos siempre lo suficientemente pequeños para que lo puedan consumir rapidamente, o lo suficientemente grandes como para que no puedan meterlos en el interior del hormiguero y tengan que comerlo directamente en la caja de forrajeo. De esta manera, podrás retirarlo facilmente cuando ya no quieran comer más.
Ojo, también hay ciertos alimentos que pueden ser muy dañinos para tus hormigas. Por ejemplo, evita siempre darles café o cítricos.
4 – Evita introducir elementos externos en el hormiguero artificial. Por elementos externos nos referimos a insectos u objetos tales como piedras, ramas, arena o cualquier otro elemento que haya estado en la naturaleza y que queramos usar de elemento decorativo.El motivo es que puedes estar introduciendo sin querer ciertos ácaros que pueden ser mortales para las hormigas, y que pueden expandirse rapidamente hasta acabar con toda la colonia si no se toman las medidas adecuadas a tiempo.
Si quieres darles insectos a tus hormigas (elemento casi esencial para cualquier colonia) tienes que congelarlos durante al menos 24h para asegurar que eliminamos cualquier posible parásito. Del mismo modo, para el caso de piedras, ramas o arena, también tendremos que pasarlos por el congelador y por el microondas para asegurar su ‘desinfección’.
5 – Ten paciencia. Aunque esté el último en la lista es el mejor consejo y el más importante. Las colonias necesitan su tiempo para desarrollarse. Las reinas pueden tardar meses en sacar adelante la primera generación de obreras y para ello sobre todo necesitan mucha tranquilidad. Si las estamos molestando continuamente con vibraciones o luz, es posible que no consigan sacarlas adelante. Algunas reinas pueden incluso a llegar a comerse los huevos si se sienten amenazadas. Por tanto, paciencia, paciencia y paciencia. Poco a poco verás cómo la colonia empieza a crecer y a desarrollarse a un ritmo exponencial.
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